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19 de abril de 2024

 Cada vez entiendo más al minotauro: este mundo tiene todas las puertas abiertas ¿por qué he de sentirme encerrado?

El tiempo me está dejando tranquilo y dolorido. 

20 de marzo de 2024

Fuego

 Soy un niño muy viejo que ya no supo ser un adulto:

Administrarme en los problemas serios,

llenar las minutas del desánimo, 

reparar las máquinas alegóricas de la casa. 


Aún así, me reinvento en la gracia pueril 

de la despreocupación y el entretenimiento

porque soy como un juego de palabras,

un fuego de palabras.


Y porque quiero morir joven a los 90 años

2 de marzo de 2024

A uno mismo

Es una enorme responsabilidad ser uno solo:

hay que cuidarse a uno mismo,

hay que evitarse a uno mismo;


comer sin hacer ruido,

hacer eco con la risa,

dormir sin dar las buenas noches,

curarse en las enfermedades,

llorar mientras se lavan los platos.


Sentirse soportado en esos momentos

camino al trabajo, en que te detienes y te dices:

¿Cerré la puerta?

Sí, sí la cerraste.


ort

6 de febrero de 2024

Péndulo

 Esto se siente igual que comer solo y aún así, masticar sin hacer ruido. 

Me mantengo al filo de la prudencia cuando nos vemos a solas y pienso: ¿Te ocurre lo mismo que a mí? ¿Te abalanzarías igual que yo para colgarme de tus labios?

Pendo de un lado al otro en pulsaciones que van de lo inmoral a lo correcto, pendo de un lado al otro entre lo que soy y no soy. 

Soy tantas personas escondidas con miedo,
soy un ruido de pájaros sobrevolando en vientos templados,
soy estridulaciones en campos abiertos de noches estrelladas,
soy el sonido de las costas de Cuba dentro en mi cabeza, 
soy el filo del papel que acuchilla los anulares anillados,

Soy tantas personas agazapadas y tibias, que cuando me nombras me envalentono y pienso que puedo seminar y crecer árboles dentro de mí hacia afuera como las plantas que rompen las macetas, pienso que puedo darte más de lo que quiero amar. 

Pero pendo de un lado al otro y estoy consciente de lo que no soy

No soy la noche tibia en el lugar de la cama,
no soy el de los sonidos veloces
no soy el de las sombras de largas ondulaciones
no soy el de la tormenta de murmullos 
no soy la última palabra de la noche ni la primera del día 


25 de enero de 2024

Smn (partes 23 y 67, de lo que van de la semana hasta el momento ya)

I

hay algunas cosas que quizá sean nimiedades pero que a veces extraño, como que haya otras voces en la casa: frecuentemente solo escucho mi voz entre susurros, gruñidos y chasquidos que hago con mi boca cuando las cosas no me salen -imagínese usted-; extraño ser nombrado cuando estoy tranquilo y en paz. 

Que se platique mientras se come: como en un capítulo de Kare Kano, que cuando Ella está con su familia hay voces y risas que tallan las paredes y calientan la comida; y cuando es Él, una sola palabra corta como el papel las luces frías que atraviesan por las ventanas. 

Que le desee las buenas noches a alguien: más que ser nombrado, extraño nombrar a alguien y usar mi voz para desearle a alguien que sueñe bonito. 


II

acepto plenamente no ser nadie, no destacar, ser la parte baja de la meritocracia, aquella en donde se hace lo que se quiere con muy poco, y que a veces, sin sospecha, uno se hace feliz y no lo sabe hasta que otro -- de al lado- le recuerde que es imposible ser feliz así. Quiero pertenecer al enorme vacío, a los que son realmente olvidados porque son los verdaderamente libres de todo. Quiero ser y quedarme en los normales, de los indistinguibles, ciudadano de relleno; de aquellos que no se reconocen en la multitud. Siento que yo, siendo quien soy con mis condiciones, ser normal a veces es mucho pedir. 

5 de noviembre de 2023

No es algo que pueda contar así de simple. 

Durante las mañanas, cuando recién despierto y aterrizo al fin la realidad, sé que en algún momento del día pensaré en tu nombre y lo diré en secreto. Me doblego, con una tristeza centelleante, de pensar que quizá te pase lo mismo que a mí, aunque no me nombres. 

No me nombres. Di de otras maneras lo que te pasa, así como hago yo. Di que es el sueño: la agradable sensación de engullirse en una cobija oscura como un conejo en el sombrero. Di que soñaste que un aire nuevo te renovaba y que te destensaste de cordajes como las hojas de otoño. Di que es lo mismo, que no pasa nada: escrituras sobre el agua, esculturas de fuego, retratos de las nubes --¿quién las recuerda?-- Di que son solo sueño raros:  


Es un dolor parpadeante de la frente hacia la nuca

Es un cansancio que hincha los pulmones

Es una flecha que atraviesa a las personas de mediana edad

Un ulular del pensamiento a las tres de la mañana

Son marsopas y mantas que vuelan y nadan

El cromar de las maldiciones comunes

Dos espadas sostenidas por manos ciegas que han aprendido la pericia de guardar silencio en situaciones críticas y delicadas:

imagínala en su nombramiento, rodeada de un ejército arrepentido (una estampida de perdones ha planchado sus trajes), imagínala ahí con el filo de dos espadas críticas comunicando que haciendo nada se llegará lejos, muy lejos, más lejos de lo que quieres.


No es algo que pueda contar así de fácil. 

11 de mayo de 2023

Más allá

 Pero yo te amo, Sirim, 

más allá del reordenamiento del mundo

no sé si plagado de dolor o placer,

del regocijo o de la expiación del bien,

más allá: yo te amo. 


Colocarán mi piel por encima de lo alto y lo dejarán calcinar al sol, me nombrarán de la misma manera en que señalan a los falsos predicadores de Erzurum, de los falsos oradores e impíos del occidente o de los hipócritas de Estambul, que en cuanto vieron la oportunidad de transformar su fe en monedas, no dudaron en hacerlo; me señalarán de la misma manera en que se repele a las alimañas y babearán de satisfacción cuando hagan sonar mis extremidades o restallar los látigos en mi espalda, y te juro, Sirim, ante nuestro hermoso El Único, que yo te amo más allá del dolor, porque no temo del dolor, en el pasado, espadas corvas han resbalado sobre mi piel y sé que la carne es blanda, pero temo, Sirim, que al llegar a las Puertas del Paraíso, se nos niegue el permiso en donde habremos de reposar el estado máximo de la paz porque no supimos ordenarnos al mundo en estos tiempos en que la letra divina se ha reformado. 

Pero yo te amo, Sirim,

más allá del Imperio del mundo

de los Templos del Sol

del Escudo Divino. 

Más allá…

 Ahora que tengo poco,

quiero apagar las velas,

guardar más silencio 

y sentirme como en casa. 



23 de abril de 2023

 uno: si fueras un arma afilada, arremetería contra mí.

te dice que está ahí para ti. Tú le has dicho que encuentras paz a su lado, palpas su abdomen y lo acaricias como si quisieras limpiarla por dentro: su cintura, su clavícula, su pecho. Tejes tus dedos en las curvas de su pelo. ¿Tienes miedo de besarla? ¿en qué cara piensan cuando acercan sus narices? Ella también teme de ti, y es que le has dicho la verdad, has llegado a ella con esa daga sanguinolienta que muchos preferirían guardar. ¿He hecho algo de lo que tú no quieras? ¿Qué quieres hacer contigo y conmigo ahora que estamos solos? Ella se duerme, tú escuchas los ruidos de su casa por la noche. No es la primera vez que se arrepienten. Piensas en todo hasta que rasguñan los primeros rayos del alba. Cuando piensas así, crees que reordenas el mundo. Tú no ordenas un carajo. Se ven otro momento, si es necesario. 


dos: no quieres hacerle daño

le has dicho que lo tuyo es muy profundo ¿en verdad lo crees así? Se te ve muy convencido de eso, pero tú no puedes hacer nada, ni siquiera para ti has querido hacer algo, solo te he escuchado quejidos y lloriqueos de que quieres que las cosas sean distintas, pero también te da miedo de lo que ocurra, ¿tú crees que ella no lo percibe? No le preguntes por el futuro, de nada sirve. Quieres enjuagar tus manos y tu boca con el agua al que llegaron desde bastante lejos y con los pies muy sucios; beban del agua que han enturbiado, bébanla hasta saciar el hastío, el capricho de la felicidad que apuran cada vez que se encuentran y luego, con el sabor que se cuaje en tu boca, atrévete a decir que este es el lugar en el que quieres estar, a ver si puedes decirlo con tenacidad, con la cara de sus hombres en tu cabeza, como una máscara de lo grotesco, sí: piensa que cuando te mira, ve la cara de sus hombres por encima de tu rostro oculto, escondido por la vergüenza de reconocer que ni te quiere tanto ni tanto a él, pero que se queda ahí porque no quiere hacerle daño, te lo ha dicho así, con esas palabras y tú al escucharlo sentiste una embestida que corneó en tu estómago, pero te quedaste quieto y sin decir nada delante de ella porque ya lo vaticinabas, necesitabas escucharlo así como ahora quieres escuchar que ella añora y pide a algo, aunque no sea creyente de nada, pide a algo que si alguien hubiere desistido, ojalá fueras tú. 


tres: 

qué es, que está entre los resquicios de tu vida diaria y que se niega perecer. Es distinto y es igual a lo de años atrás. Están ahí para hacerse bien, aunque no sea cierto y aunque sí.

9 de abril de 2023

Espacios

Te dije que te quería cada vez más y esperé que ocurriera lo mejor. Este no es mi lugar en el mundo, aunque me sienta muy feliz aquí, así y contigo. 


¿Tú habrías hecho otra cosa para o por nosotros?

Dime, ¿nos hicimos un favor? ¿Vamos a sentir que somos mejores personas? 


Siempre despierto solo. Me preparo de comer únicamente para mi, me muevo solo a cualquier lado. Cargo con la enorme responsabilidad de ser uno. Mi espacio es una casa grande donde justo cabríamos tú y yo en un abrazo 


si decidieras estar

si lo pudieras hacer

si fuera posible.


Entonces, te he dicho que es cada vez más; entiende que los días pasan a pesar de las distancias, supongo que en algún momento se desinflamará mi corazón y luego podré decir que es otra cosa: un bloqueo mayor, las vías coronarias o cualquier otra urgencia de la desaceleración. Te he dicho que es cada vez más y esperé lo mejor. 


¿Hacemos esto por los demás? ¿Les estamos haciendo un bien? Se desquiciarían, perderían el rumbo, todo puede ser siempre de la peor manera. Dijimos que no romantizaríamos ni seríamos mártires: son los tiempos, llegamos tarde, de todo se puede prescindir. Oscuro, como los hombres que no saben amar, pero ¿es más clara la desavenencia? 


Despiertas siempre acompañada. Hay bocas que podrían comer de ti. Tú espacio es un cajón pequeño en donde quepo yo con todas todas mis cosas; un cajón dentro de un armario en un cuarto de la casa. Y aún así pienso que yo podría valer la pena, aunque no siempre me convenzo. 


Todos los días insistes en que ya no hay lugar en el mundo para ti, aunque te ofrezca mi cuerpo para que lo habites y veas en mis ojos que todas las puertas están abiertas como en los laberintos. Estoy prendido de ti.


Ya has ordenado tus cosas. No hay lugar en el mundo, aunque seamos muy felices aquí y así.



25 de marzo de 2023

 La oscuridad del cuarto, los dos sentados en diferentes puntos de la cama grande y hablando en voz baja para que no los escuchen en los otros cuartos. Él tiene sus cosas listas para irse, dice que es todo su culpa y se sabe bien que no es chantaje porque no se puede obtener ventaja de una situación así. Ella lo piensa de una y de otra manera, le dice que está bien si se queda: las cosas igual no van a cambiar. 

Cuando me lo platica, no sé en dónde colocarme, no sé qué entender. Estoy prendido de ella en un enclave que es un refugio de espinas. Siempre distante, siempre cerca. 

Todos los días nos vemos y compartimos el mismo espacio con las rodillas casi juntas; me platica sus sueños y yo los míos; multiplicamos la risa y dividimos la aflicción. 

Todos los días pienso que este no es mi lugar en el mundo, aunque me sienta feliz aquí. 

21 de marzo de 2023

 No se te ocurra decir que las cosas han cambiado, no sabría contener mi enojo hacia contigo. 


Cuando debiste hacer nada, echaste nudos a mis brazos.

Cuando debiste de actuar, dejé de oír tu sonido. 


Y dije: está bien, así en tu lado y yo en el mío; ahí su corazón y aquí el mío. ¿Con qué irresponsabilidad actúan tus sentimientos sobre los míos? ¿te das cuenta que tu fragilidad nos rompe?


No de todo eres culpable porque no he podido conducirme, pero es que eres un viento de la noche que remueve las cosas cuando nadie lo ve y eres un idiota escapista de las consecuencias.

Eres una ola que siempre regresa, predecible como el caer de las hojas, contenido como un tigre en al agua.   


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ni idea de qué estoy escribiendo 

escribo en automático cosas que ni estoy entendiendo por donde van o qué 


voz femenina, sentimiento de rencor y culpa compartida, pensaba en Norma Lazo

15 de marzo de 2023

Esto

 Me detengo, pienso en el color de sus ojos, la forma de su cuerpo, su cabello largo y ondulado; él es muy bello. Imagino el tono de su voz y su comportamiento: ¿es de un fuego verde cuando se enfada? ¿es un río tibio cuando está triste? Solo lo he visto de lejos. 

Luce tan jovial, aparenta mucha energía; pienso en la fuerza de sus abrazos, su manera de estar en la cama. ¿Por qué me hago esto? Él es un hombre muy bello. Y su risa... 

-- ¿Pasa algo? - pregunta ella porque me detuve. 

Me miro en sus ojos, una figura pequeñita. Él también se refleja ahí todos los días, cuando sale el sol y cuando se oculta. Ha estado más años en esos ojos, está habituado de vivir ahí como un conejito en la luna. ¿Por qué le hago esto? No soy mejor que él ni que nadie.

-- ¿Estás bien, pasa algo? -insiste. Sus dedos, torcidos entre los míos, ¿Por qué hacemos esto? 

No es algo que quiera que pase. Yo me habría dejado morir de sed o de frío, yo habría aprendido a vivir de otro modo, del modo correcto; yo habría de ahogarme en mis propios suspiros. Yo sé estar solo, he vivido así durante mucho tiempo y ahora somos muchos en la casa pequeña de mi pensar en donde cabríamos tú y yo si no fueran tan grandes y estorbosos nuestros sentimientos. Y en cima de todo esto, él es un hombre muy bello.   

--¿Pasa algo?- insiste ella. No puedo con esto

12 de febrero de 2023

No dejo de pensar que murió con mucho dolor: espasmos en el vientre hasta doblarlo por la mitad; luego, en la cama, sudoraciones y la pérdida de la conciencia. 

Y sabes, había otras formas de dolor: desde hace meses me visitaba a casa con la urgencia de hablar y liberar el llanto y no sabes ni el dolor ni la dicha que sentía de estar ahí para él.

Se fue con mucho dolor. 

3 de febrero de 2023

 Espero que cuando me tenga que ir, lo haga sin dolor y sin hacer mucho ruido. 

Y luego de remover un poco muy poquito el cosmo, las cosas sigan iguales.