19 de abril
Hablaría, por ejemplo, de la paternidad, aunque no sé qué signifique eso. Le hablaría de cómo van mis cosas y de cómo es que lo estoy resolviendo casi de manera accidentada, pero resuelta al fin y al cabo. Porque llego al final de los días y me siento satisfecho con lo que hice porque no creo hacerlo mal: ser autosuficiente, no ser autodestructivo.
Tampoco sé como es la manera correcta de padecer la vida, también estoy improvisando con lo que tengo a la mano, con lo que tengo en la mente y si tuviera un gato, me gustaría platicarle de eso, que de nuevo soy un experto atleta de los días sin pausa, de las noches sin brillos y que me siento pleno aunque al llegar la noche, poco antes de dormir, me repito que este día también lo voy a olvidar.